Tres preguntas para Jacques Gaillot
 
El presidente Bush celebró en Israel los 60 años del Estado hebreo mientras miles de palestinos se manifestaban para conmemorar la « Nakba » es decir la catástrofe. ¿Cuál es su reacción al respecto?  
   
occupation Los Estados-Unidos son aliados incondicionales de Israel. Esta visita no tiene nada de sorprendente. Pero lo que me sorprende es que se pueda estar de celebración y parabienes mientras los palestinos han sido desposeídos de sus tierras, siguen bajo la ocupación del ejército israelí, el pueblo de Gaza sobrevive día tras día, más de 10 000 presos palestinos se pudren en las cárceles israelíes... ¿Cuando no hay paz, puede uno regocijarse? Nunca se gana nada humillando a un pueblo.
 
   
La junta birmana impidió a los humanitarios trasladarse a las zonas más damnificadas. En la situación dramática que vive la población, ¿acaso no existe un derecho a la ingerencia humanitaria?  
   
La junta militar persiste en una actitud criminal. Se niega a socorrer a su población que no tiene viviendas, ni atención sanitaria, ni agua potable. Es un escándalo. El texto adoptado por la ONU en el 2005 reconoce el principio de « la responsabilidad de proteger » a la población cuando se trata de un genocidio o crimen contra la humanidad. ¿Se puede hacer extensivo este principio a las catástrofes naturales?
contre l'humanité
 
   
En la ONU, estados como Rusia y China se oponen firmemente a ello en nombre de la sacrosanta soberanía de los Estados. ¡Qué lástima! Se perdió una ocasión. El pueblo no es la preocupación preferente de estos dirigentes.  
   
El 17 de mayo, se ha celebrado el día mundial de la lucha contra la homofobia. ¿Ve Usted avances en este tema?  
   
contre l'Homophobie En Europa, existen avances indiscutibles en el campo del derecho, gracias al Consejo de Europa y el Parlamento europeo. Lo que está en tela de juicio ya no es la homosexualidad sino la homofobia. Las instancias europeas penalizan los comportamientos homófobos. Lo celebro. Pero la intolerancia hacia la homosexualidad permanece en las familias, los lugares de trabajo, las cárceles y también, desgraciadamente, en las Iglesias.
 
   
La represión contra los homosexuales prosigue en más de 80 países, en los cuales el Islam es, en la mayoría, la religión oficial. La homosexualidad es un crimen castigado con la muerte en Arabia Saudita, en Irán, en Mauritania, en Nigeria…
En Occidente la historia es abrumadora. Los homosexuales eran considerados como pecadores, enfermos, criminales. Durante la inquisición, pagaron un fuerte tributo. Bajo el régimen nazi, decenas de miles de homosexuales fueron deportados.
En la actualidad en Francia, la principal discriminación que sigue vigente en la ley se refiere a la homoparentalidad y el matrimonio entre parejas del mismo sexo.
Queda todavía una larga lucha por la libertad y la igualdad.